Mi Sifu de Tai Chi Chuan el Dr. Yang Jwing Ming es original de la China y para la época en que el era un pequeño niño, como parte de la cultura se acostumbraba a transmitir las enseñanzas a través de cuentos. Estos cuentos se transmitían de generación en generación y muchos de ellos estaban diseñados para fortalecer el coraje, la autoestima, la confianza, y la determinación para enfrentar cualquier adversidad.
Quiero compartir en este momento uno de tantos cuentos que mi Sifu ha querido a su vez compartir con todos sus alumnos.
Hace mucho tiempo una mujer llamada Lily luego de casarse se fue a vivir con su marido y la madre de este.
No pasó mucho tiempo cuando Lily se encontro con que no se llevaba bien con su suegra. Cada una tenía un carácter completamente diferente. Lily se molestaba con los hábitos de su suegra y no solo eso sino que además ella criticaba a Lily constantemente.
El tiempo transcurría, Lily y su suegra no paraban de discutir y de pelear. Pero lo que agravaba la situación era que, de acuerdo a la antigua tradición China Lily tenía que ceder ante su suegra y obedecer sus deseos. Todas las peleas y la infelicidad que había en la casa producían gran angustia al pobre marido.
Finalmente Lily no podía soportar más el mal temperamento y las imposiciones de su suegra, por lo que decidió hacer algo al respecto.
Lily fue a ver a el mejor amigo de su padre el Sr. Huang quien vendia hierbas y esencias. Ella le conto la situación por la cual estaba pasando y le pregunto si le podía dar algún veneno de manera de terminar con el problema de una vez por todas.
El Sr. Huang pensó por un momento, hasta que finalmente dijo “Lily, te voy a ayudar a resolver el problema, pero debes escucharme cuidadosamente y seguir al pie de la letra mis instrucciones”. Lily dijo, “si Mr. Huang, yo hare exactamente todo lo que Ud. Me diga”. El Sr. Huang se dirigió hacia la parte trasera de la tienda, regreso en unos cuantos minutos con un paquete de hierbas. Le digo a Lily “No puedes usar esta combinación de hierbas de manera rápida y apresurada en tu suegra. Porque eso generaría sospechas ante ti, por lo tanto te he dado una cantidad de hierbas que lentamente harán efecto.
Prepáralas un día sí y otro no, y se lo añades a la comida. Ahora para estar seguros que nadie sospechara de ti cuando ella muera, debes actuar de manera amigable con ella, no discutas por nada, obedécela en sus caprichos y trátala como a una reina.
Lily estaba muy feliz. Estaba agradecida con el Sr. Huang y rápidamente se fue a la casa para darle inicio al plan para asesinar a su suegra.
Las semanas y los meses transcurrieron siguiendo las instrucciones sin falta como se lo había indicado el Sr. Huang de servirle el veneno un día si y un día no en la comida a su suegra. Ella recordaba que el Sr. Huang había dado una indicación importante para impedir las sospechas, de tal manera que fue controlando su temperamento, obedeciendo a su suegra y tratándola como si fuera su propia madre.
Después de transcurrido seis meses toda la casa había cambiado Lily había controlado prácticamente su temperamento tanto que se dio cuenta que ahora rara vez se molestaba.
No había tenido una discusión desde hace seis meses con su suegra quien estaba ahora mucho mas simpática y fácil de llevar. La actitud de su suegra cambio radicalmente tanto que comenzó a amar a su nuera y empezó a tratarla como si fuera una verdadera hija, comenzó a decirles a sus mejores amigas y a sus parientes lo orgullosa que se sentía de su nuera.
Lily y su suegra se trataban ahora como si fueran madre e hija. El esposo de Lily estaba realmente feliz de ver lo que estaba sucediendo entre ellas.
Un dia Lily fue a ver al Sr. Huang a solicitarle ayuda de nuevo. Entonces le dijo: “Querido Sr Huang ¡por favor ayúdeme a detener los efectos del veneno que le estaba dando a mi suegra! Ella ha cambiado, ahora es una persona agradable y he comenzado a amarla como a mi propia madre. No quiero que ella muera debido al veneno que le he estado dando”.
El Sr. Huang sonrió y asintió con la cabeza. “Lily, no hay nada de lo que te tengas que preocupar, yo nunca te di ningún veneno, todas las hierbas que te di eran simplemente para mejorar su salud. El único veneno que había estaba en tu mente y en tu actitud hacia ella, pero todo ha desaparecido de tu relación con ella gracias al amor que le has dado.
Estimados amigos y amigas… ¿Se han dado cuenta en algún momento que en muchos casos así como tratas a otros también ellos te lo devolverán de la misma manera? En China existe un dicho que reza así:
La persona que ama a otros también será amada…
También quiero compartir una frase de Sam Keen, escritor, profesor y filosofo americano:
Aprendemos a amar no cuando encontramos a la persona perfecta, sino cuando llegamos a ver de manera perfecta a una persona imperfecta.
Tomado de: YMAA Storybook Series Nº 2
Traducido por Luis Nuñez
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